miércoles, 31 de diciembre de 2014


viernes, 5 de septiembre de 2014

Uno de los atractivos turísticos de nuestra querida patria, y ese es la Reserva Nacional de Paracas. Pisco - Ica - Perú

martes, 2 de septiembre de 2014

La provincia de Pisco celebrará el día central del 194° aniversario del desembarco de la expedición libertadora del general don José de San Martín en la bahía de Paracas, el 8 de setiembre de 1820.
La Ley N° 23586 reconoce el 8 de setiembre como el primer día de la libertad en el Perú y a la provincia de Pisco como cuna de la primera bandera nacional, que declara, además, un día cívico no laborable en toda esta jurisdicción.
Por tal motivo, se realizarán una serie de actividades como parte de un programa especial por el aniversario.
Felicitaciones a nombre de la I.E. PNP: Teodosio Franco García. Ica - Perú













lunes, 1 de septiembre de 2014













GALERÍA DE FOTOS DEL ARTISTA, PROFESOR DAVID MARTINEZ QUIJANDRÍA
EN LA V BIENAL INTERCONTINENTAL ARTE INDIGENA - ECUADOR



















lunes, 28 de julio de 2014


lunes, 21 de julio de 2014



Muy interesante, hay que tomarlo como ejemplo para nuestras vidas.


Muy interesante, esperamos que les agrade.

sábado, 19 de julio de 2014


Es muy conocida la expresión popular: "El mejor amigo del hombre es el perro". ¿Es verdad?, o,  ¿acaso  el  libro es el mejor amigo del hombre?


-¿Qué es lo que hace un amigo verdadero por ti?

-Te ayuda a levantarte cuando caes, te da buenos consejos, te brinda su apoyo,  se sacrifica por ti, se hace  presente en los momentos más difíciles, su experiencia te la comparte y sobre todo: no espera ningún tipo de retribución.

Entonces, en la disyuntiva  entre el perro y el libro, ¿quién es tu amigo?
El perro podrá ser el mejor compañero o acompañante incondicional que pueda tener el hombre, pero no te puede dar consejos, no te puede levantar,  tampoco puede compartir su amplia experiencia, además de  que su propia existencia es corta; en cambio el libro sí cumple con todos esos requisitos que enmarca la verdadera amistad.

Los mejores amigos son los libros: no te piden nada, no te miran mal, no reclaman, no hablan mal de ti a tus espaldas, no te roban ni intentan llevarse a tu pareja, envejecen con nosotros porque nunca nos abandonan, por el contrario, somos nosotros los que los abandonamos.

Los libros son buenos y generosos y su razón de ser somos nosotros los lectores. ¿Qué hubiera sido de la humanidad sin aquellos hombres y mujeres que han entregado su única vida al estudio y a  la investigación científica? Pues, seguramente aún estaríamos en lucha constante con muchos animales y entre ellos el perro.

Hoy encontramos una gran variedad de textos que le podrían dar solución inmediata a cientos de problemas que enfrenta el hombre, pero qué necios somos a veces y no le consultamos porque creemos que nuestro mal no tiene cura. Nada más falso, pues los libros nos pueden ayudar y sacarnos de las profundidades.

Actualmente el libro tiene nuevos formatos como el digital que está a nuestro alcance y no cuesta casi nada, pero vaya nuestra necedad de ignorarlo o cambiarlo por las nuevas tecnologías que no te dan "amistad", sino más bien "aletargamiento con diversión".

Si tienes un problema o, sencillamente no lo tienes, de todas maneras busca el consejo y el conocimiento a través de nuestro amigo: EL LIBRO

Gracias por leer.

EL LIBRO Y EL NIÑO
Aristo era un niño muy curioso, que siempre esta escudriñando las cosas del abuelo.
El cual llega encontrar un cofre antiguo, sorprendido por tal hallazgo, forcejea el cofre y logra abrirlo, sus manos se arremeten dentro y saca cada una de las cosas que encuentra, ahí ante sus ojos,  ve en lo más profundo del cofre un libro tan grande que  ocupaba todo el cofre, y para sacarlo, se debe esforzar mucho ya que era grande y pesado, logra sacarlo y lo más pronto posible lo lleva donde su mama a preguntarle.
Aristo – mamá mira lo que encontré en el cofre del abuelo.
Mama – hijo con cuidado eso es  muy pesado y grande, no te vayas a lastimar.
Aristo – no te preocupes mama, soy fuerte y ¿qué es esto?
Mama – es un libro antiguo, solo que es más grande.
Aristo – se puede leer como los libros de la biblioteca.
Mama – si Aristo.
Aristo -  entonces me iré a la biblioteca a leerlo.
La curiosidad lo lleva a Aristo  a la biblioteca para limpiarlo y  ver como es el libro, por fuera como por dentro de la pasta, revisándolo nota que tiene hojas gruesas, y letras comprensibles pero raras y se pregunta.
Aristo -  ¿Qué libro más extraño?
                 ¿Qué?, ¡es un libro!
  De un momento a otro el libro se comienza estremecer, y se escucha un bostezar que sale del propio libro, se levanta y dice:
Libro – que buena pregunta chico.
Aristo – (asombrado por tal suceso, entre tartamudeo pregunta)
                  ¿Quién eres tú?
Libro – soy un libro, pero, me puedes llamar Sócrates.
Aristo -  soy aristo, ¿pero cómo puedes hablar?
Sócrates – es la magia de la palabra, y tú pregunta me despertó del  letargo sueño y como nadie me pregunta nada y  no necesitaban de mi me puse a dormir.
Aristo – y tú puedes responder que es un libro.
Sócrates – claro soy un libro o no, ja ja ja ja.
Aristo – eso creo, mi mama me explico que un libro sirve para leer.
Sócrates -  vaya vaya, un libro no solamente sirve para leer, el libro es como si fueras tu.
Aristo – no, yo soy un niño, no un libro.
Sócrates – como que no, si somos parecidos.
Aristo – pero yo tengo papas y tú.
Sócrates – yo también tuve padre quien me educo y se llama Sócrates como yo, lee aquí en la primera página, está escrito su nombre en mi página. En ti también esa escrito su apellido.
Aristo – y como en mi pueden estar escrito, no entiendo, si no tengo nada escrito en mi cuerpo.
Sócrates -  te puedo decir que si, quizás no en la misma manera que yo, pero, se pueden reflejar en tu comportamiento y actitudes, en tu forma de reír, mirar, enfadarte, etc.
Aristo – pero no tengo hojas.
Sócrates – pero tienes cuerpo.
Aristo – no tengo pasta.
Sócrates – pero tienes ropa, edad, y mucho que conocer.
Aristo – quieres decir que a mí me pueden leer como a un libro.
Sócrates – a si es amado, cuando tus padres te observan, al realizar alguna tareas, al curiosear o investigar, hasta las travesuras que puedas hacer, tus padres hacen una lectura de tu aprendizaje.
Aristo – no sabía que me podían leer así y ¿Cómo me escribo?
Sócrates –  te  escribes, en el momento que vas aprendiendo  y utilizando las cosas que lo interiorizas, como; hacer las cosas correctamente, hacer caso a tu padres, a tu profesor, aprender ser responsable, solidario, a compartir, respetar, ser el mejor en las cosas que haces, etc.
Aristo – entonces tratare de escribirme y ser el mejor para que mis padres se sientan contento y ¿Cómo borro cuando me equivoque en algo?
Sócrates – fácil, solamente sigue intentándolo hasta mejorar, será la mejor manera de borrar lo malo.
Aristo – gracias, no pensé que podría hacer todo eso, ahora entiendo que soy como un libro  en blanco y que depende de mí, gracias amigo Sócrates.
Sócrates – podrás escribirte, reescribirte, hasta inventarte, dependiendo de cómo  vas madurando.
Aristo – me escribiré en versos, quizás en poemas o más aun en canción para deleitar a mis padres.
Sócrates – recuerda esto aristo;
Soy el libro, lo abstracto hecho concreto 
Soy tu lectura, la plasmación de tus inquietudes;
Sentimientos, investigaciones, de tu vida, de la genialidad, locuras, fantasías y sueños plasmados como escritos en estas páginas.
Quizás en diversos  idiomas, en diferentes letras con dibujos o sin él.
Con colores fríos o cálidos 
Con diseños y tamaños comerciales.
Al fin y al cabo soy “el libro”
Que transmite tu ver de las cosas, del universo y de sí mismo,
Puedo tener días de vivencias o siglos de vida, como ser catapultado por unos y otros,
¡Sí, soy el libro!
Que te de alegría,
Que te hace suspirar y sonar,
El que te alimenta y retroalimenta el conocimiento,
¡Puedo ser tú o puedo ser el!
¡Puedo ser el padre de todos, como puedo ser el hijo de todos!
Quizás la herencia de la humanidad
Soy el alma, tu alma, oh el alma de alguien
Soy tu pensar, oh el pensar de alguien
En mi perduraras en instantes oh, por la eternidad.
Aristo – entonces, Sócrates, ¡yo soy un mundo! Y puedo escribir mi mundo, escribir  mi forma de pensar,
De lo que siento
De lo que veo
De lo que invente
Gracias amigo Sócrates y gracias por ser un buen consejero y  de tus experiencias  brindadas.

¿Te gustó la lectura?






Autor: Anónimo
Había una vez una rosa muy bella que sentía de maravilla al saber que era la rosa más bella del jardín. Sin embargo, se daba cuenta de que la gente la veía de lejos, porque a su lado siempre había un sapo grande y oscuro. Indignada ante lo descubierto le ordenó al sapo que se fuera de inmediato; el sapo muy obediente dijo:
Está bien, si así lo quieres.
Poco tiempo después  el sapo pasó por donde estaba la rosa y se sorprendió al verla totalmente marchita, sin hojas y sin pétalos. Le dijo entonces: Vaya que te ves mal. ¿Qué te pasa?
Es que desde que te fuiste  las hormigas me han comido día a día, y nunca pude volver a ser igual.
El sapo sólo contestó:
Pues claro, cuando yo estaba aquí me comía a esas hormigas y por eso siempre eras la más bella del jardín.
La Moraleja
Muchas veces despreciamos a los demás por creer que somos  más que ellos, más bellos o simplemente que no nos “sirven” para nada.

Todos tenemos algo que aprender de los demás, no vaya a ser que esa persona a la que despreciamos nos esté haciendo un bien y nosotros ni siquiera nos enteramos.

lunes, 14 de julio de 2014


LA FLOR Y EL SOL

Había una vez una flor que se quejaba del sol , pero ella no sabía que el sol era importante para su crecimiento. Un día el sol le preguntó a la flor ¿ por qué me odias flor?

 por qué me das mucho sol, le respondió y ya no aguanto más.
 Al día siguiente el sol decidió no salir más, y la flor pensó que por fin se libró de él, estaba feliz.
 Pasó una semana y la flor comenzó a congelarse y a marchitarse con el frío.
Así que decidió hablarle al sol para que le diera nuevamente calor, pero el estaba muy triste y no fue fácil para el sol hacerle caso, pues se sentía muy herido.
 Finalmente el sol olvidó los rencores y decidió salir ,la flor agradeció su gesto pues reflexionó sobre la importancia que tiene el sol en nuestras vidas.



 ¿Qué valor extraes de la lectura?


NADIE SABE LO QUE TIENE HASTA QUE LO PIERDE


Había una vez un niño llamado René, cuya  madre siempre estaba preocupada por él, pues sus notas eran  un desastre.
Así pasaron los años, la madre de René  siempre lo aconsejaba, pero él no la escuchaba, aún más, le faltaba al respeto.
Después de un tiempo la madre de René se sintió  delicada de salud, visitó al doctor, luego de hacerse  algunos exámenes, el médico le dijo que su enfermedad era grave dándole poco tiempo de vida.
Siguió su  rutina sin contarle nada a su hijo sobre su enfermedad, seguía aconsejándolo y  René sin obedecerla.
  Ella sufría mucho, no sabía que iba a ser de su hijo  cuando ella no estuviera a su lado,
Pasaron los días hasta que llegó el día fatal.  Aquella mañana despertó muy temprano, saludó a su hijo y le pidió que antes que se fuera al colegio le diera un beso, más él respondió que estaba apurado, que no tenía tiempo y se marchó.
 Aquel día la madre de René lloró mucho hasta que dio su último aliento.  Cuando René llego a su casa, tocó y tocó la puerta, esperó mucho tiempo hasta que decidió saltar el  cerco y llegar a la sala. ¡Seguramente su mamá habría salido!  Cuál fue su sorpresa al ver a su madre muerta en el suelo, se arrodilló… lloró, gritó, pidió  perdón por toda su irresponsabilidad, se sintió ¡culpable! no pudo darle el último  beso que ella le ¡pidió!
Salió a la calle, pidió ayuda, sus vecinos   vinieron apoyarlo y así enterraron a su madre.
Se fue de su casa, buscó trabajo, encontrando explotación, abuso, soledad y miseria.
Fue entonces cuando comenzó a valorar los buenos consejos de las personas que conoció y decidió luchar por ser mejor persona. Luchó, trabajo mucho, estudió y  salió adelante recordando siempre  los consejos de su madre.

Finalmente René logró ser feliz con el cambio de su vida, gracias a los consejos de su querida y recordada mamá.